lunes, 9 de junio de 2014

La fe nace de un encuentro

La fe nace del encuentro con el Dios vivo, que nos llama y nos revela su amor, un amor que nos precede y en el que nos podemos apoyar para estar seguros y construir la vida.

Papa Francisco

El encuentro con Jesús

El seguimiento de Jesús no se trata de seguir una idea, un proyecto, sino de encontrarlo como una Persona viva, de dejarse implicar totalmente por él y por su Evangelio

Benedicto XVI

domingo, 8 de junio de 2014

El cristianismo como sentido de vida

¿Quién me puede enseñar a mí a vivir de manera sana: los filósofos, los psiquiatras, los políticos?, ¿dónde puedo aprender a vivir: en los libros, en la televisión, en la calle?

¿Quién me puede revelar el secreto de la vida o la meta que ha de orientar mis pasos?, ¿quién me puede enseñar cómo he de actuar y qué tengo que hacer para vivir con acierto?, ¿quién me dará a conocer dónde puedo yo fundamentar mi existencia?, ¿qué puedo, en definitiva, esperar de la vida?,  ¿en qué me puedo apoyar ante el mal, la vejez, o la muerte?

La experiencia del cristiano consiste en ir descubriendo la verdad que encierran las palabras de Cristo "Yo soy el camino, la verdad y la vida" (Juan 14,6). Sin Cristo, la vida se me haría oscura y enigmática, más difícil y dura, más cerrada e impenetrable, más vacía de esperanza. En el fondo, la vida se me volvería más desdichada.

Estoy convencido de que una persona está a punto de tomar en serio a Jesucristo cuidando intuye que en Él puede encontrar precisamente "lo que más falta le hace" para ser feliz con una felicidad más real y verdadera.

José Antonio Pagola en La fe, ¿obstáculo o fuente de felicidad?.

Pobres o empobrecidos

Los pobres no existen, lo que existen son los empobrecidos.

Leonardo Boff

El Diablo como serpiente, la serpiente como astucia.

La primera apariencia que Satanás cobró en sus encarnaciones terrestres fue la de la Serpiente.

Según el Génesis la serpiente era "el más astuto de todos los animales". Pero, ¿nos hemos preguntado alguna vez las razones de esa astucia - que es sagacidad y cálculo, o sea inteligencia - de la serpiente?. La serpiente es el más astuto de los animales porque es tambien el más mísero, el más desdichado. El Creador se mostró con él avaro hasta la crueldad. No tiene alas con que volar, no tiene aletas ni plumas, no tiene piernas, ni brazos, ni manos. De ahí que debe forzosamente concentrar en la cabeza toda su capacidad de ataque y de defensa: concentrarla en el ceno de sus dientes, en la inteligencia de su cerebro aplastado.

Toda miseria tiene su compensación. La Serpiente debe arrastrar el cuerpo en el polvo y el fango de la tierra; pero es, sin embargo, el único animal que puede hacer de sí mismo un círculo, cerrar y ceñir la superficie del mundo de un límite, como hace precisamente la inteligencia.

Giovanni Papini en  El Diablo.

¿Cómo abordar el tema del demonio?

El Diablo es aún poco conocido. Ese ser infame, y sin embargo famoso, invisible, y sin embargo omnipresente, una veces negado y otras adorado, unas veces temido y otras vilipendiado, que tuvo sus cantores y sus sacerdotes, sus cortesanos y sus mártires, sigue siendo más popular que comprendido, más representado que desentrañado. Es preciso mirarlo con ojos nuevos, acercarse a él con espíritu nuevo. No con el servilismo del mago que quiere sacarle provecho, ni con el terror del devoto que quiere defenderse contra él, sino con los ojos y con el espíritu del cristiano que quiere ser cristiano hasta las últimas consecuencias, tambien las más temerarias, del Cristianismo.

Se llama, en hebreo, Satan. Es decir, el Adversario, el Enemigo. Se llaman, a la manera griega, el Diablo, es decir, el Acusador, el Calumniador.

Giovanni Papini en El Diablo.

3 revoluciones culturales

Como consecuencia de la revolución copernicana en las matemáticas y en la astronomía, el hombre ya no podía considerar su morrada terrena como el centro del universo: ésta fue a una revolución cosmológica. Después de Darwin, el hombre ya no podía considerar que no tenía parentesco con los animales irracionales: ésta fue una revolución biológica. Freud dejó al descubierto el inconsciente del hombre y puso de manifiesto sus poderosos impulsos irracionales, eliminando así la ilusión del autodominio. Ésta fue a una revolución psicológica.

Donald de Marco en Arquitectos de  la cultura de la muerte.

El ser y el reconocimiento

El ser precede al reconocimiento; la bondad precede al amor.

Donald de Marco en Arquitectos de la cultura de la muerte.

¿Los buenos estudiantes o las buenas notas?

Sócrates empleó toda su paciencia para convencer a Eutipro, un arrogante teólogo, de que las cosas no son buenas porque los dioses las amen; es más bien que los dioses aman las cosas porque son buenas. No se trata, podríamos decir en nuestros días, de que sean las buenas notas las que hacen bueno al estudiante, sino que son los buenos estudiantes los que se sacan buenas notas. El ser precede al reconocimiento; la bondad precede al amor.

Donald de Marco en Arquitectos de la cultura de la muerte.

La crítica de Marx a la religión

Cuando Marx despreciaba la religión, calificándola como "el opio del pueblo", el "halo de la maldición", "el suspiro de la criatura oprimida", "el corazón de un mundo sin corazón", estaba criticando no la auténtica práctica de la religión, sino su cáscara. Marx reaccionó, por utilizar la distinción de Maritain, frente al "mundo cristiano", no frente al "cristianismo". Es decir, creyó que la caricatura era el arquetipo, que la burla era el modelo. Por su parte, lo generoso hubiese sido decir: "Resulta lamentable que la gente, en ocasiones, haga un mal uso de la religión utilizándola como una droga para embotar su sensibilidad moral e intelectual". De ese modo, habría reflejado una comprensión de la diferencia entre las práctica torcida y la práctica auténtica de la religión. Sin embargo, la rechazó porque confundió la religión verdadera con la falsificación de la misma.

Donald de Marco en Arquitectos de la cultura de la muerte.

La creación esencialmente buena

Para el judaísmo y el cristianismo, la creación es esencialmente buena, y el mal es una privación o carencia de bien. El bien y el ser son idénticos, como argumenta Santo Tomás de Aquino. Sobre esta forma de entender la naturaleza puede florecer una cultura de la vida. Pero cuando se invierte esta metafísica, cuando el mal y ser se consideran sinónimos, resulta evidente que el futuro será una cultura de la muerte.

Donald de Marco en Arquitectos de la cultura de la muerte.

Fórmula ADE

Fórmula ADE:
Amor en todo lo que hace.
Disciplina desde la autonomía.
Estilo propio que se impronta en nuestras creaciones.

Joaquín Fernández

Exigencias de la Filosofía

Además, la filosofía exige valor, porque no sabemos qué es lo que hay al otro lado de la puerta hasta que la abrimos. Necesitamos valor para enfrentarnos a lo desconocido. La filosofía también nos exige franqueza, para que podamos dar cuenta de lo que vemos tal y como es, sin embellecerlo ni empequeñecerlo.

Donald de Marco en Arquitectos de la la cultura de la muerte.

Comprender y amar

"Comprender es disponerse a amar".
Giovanni Pappini en "El Diablo"